27 de mayo de 2009

Rodolfo de Habsburgo, el heredero de un imperio desplomado.



Muchas veces en la historia se engrandecen a personas que destacan por lo bueno o por lo malo e ignoran a otros que en cierta medida pasan más o menos desapercibidos. Las excentricidades de la emperatriz Elizabeth de Austria-Hungria, tachada de loca, anoréxica, bulímica y otras difamaciones provenientes de lenguas viperinas, ha dejado de lado la historia de Rodolfo, su hijo, e incluso a eclipsado a su esposo, el emperador del conglomerado Imperio Austro-Húngaro.




No por ello quiero decir que Rodolfo haya sido ignorado por los historiadores, dispulpen mi ignoracia respecto a la bibliografía sobre Rodolfo, pero sin duda alguna su historia ocupa una décima parte de las páginas que ha acaparado su madre, cuya vida causa tanta expectación como la vida y muerte de su hijo.


Desde su nacimiento en agosto de 1858, Rodolfo estuvo marcado por su destino. A unas horas de haber visto la luz, se le concedió el grado de coronel de un regimiento que desde ese momento llevaba su nombre. Algo totalmente inusual en la corte vienesa ya que lo normal era concederle el grado durante la pubertad. A los seis años fue apartado de su hermana Gisela, a quien apreciaba muchísimo, pue su padre, el Emperador, consideraba que había que endurecerlo y convertirlo en un buen soldado (el ejército era apreciado por el Emperador que siempre vestía de uniforme) y le puso un preceptor, Leopoldo de Grondecourt. Elizabeth, a quien le secuetraban-literalmente- a sus hijos nada mas nacer, vio todas las estratagemas de su marido, quien contaba con el apoyo de su madre la todapoderosa archiduquesa Sofía, y a pesar de que le desagradaban decidió no intervenir, pues se había rendido en la lucha de recuperar a sus hijos.




Grondecourt sometía al niño a verdaderos torturas con el fin de endurecer su cuerpo y su mente. Ente las muchas de las atrocidades está la de encerrarlo en un recinto del parque Leinz, completamente solo y anunciándole que habían soltado allí un jabalío o bien lo despertaba a bases de disparos al aire y si el niño lloraba lo sometía a duchas frías. El niño pronto comenzó a perder pesos y a tener ataques de histerias. Gracias al "chivatazo" dado por el Coronel Latour, ayudante de Grondecourt, Elizabeth se enteró de las atrocidades cometidas contra su hijo y amenazó al emperador con echar al preceptor o perderla a ella. El emperador que no se tomaba a broma las amenzas de su esposa, pues bien sabía que podía cumpliras, echó al preceptor. Desde ese momento Elizabeth se ocupó de la educación de su hijo contratando preceptores poco ortodoxos que enriquecieron la mente del heredero, que aunque no pudo ir a la universidad recibió el título de Doctor Honoris causa por la Universidad de Viena.




Las ideas que el joven heredero iba adquiriendo poco tenían que ver con su futuro. Sus ideas eran liberales y anticlericales, digno hijo de su madre. Y su formación liberal pronto tuvieron como consecuencia una intensa actividad político-literaria que comenzó en 1878. De forma anónima escribió un pasquín titulado La nobleza austríaca y su misión constitucional y varios artículos en Neues Wiener Tablett, un periódico vienes de tendencias democráticas.




En 1880 se comprometió con la princesa Estefanía de Bélgica y aunque de cara al público se mostraban felices, en absoluto lo eran. Rodolfo era un hombre mujeriego, pues su atractivo le posibilitaba tener cualquier mujer, su cuñada lo describía así: más que guapo, era fascinante. De talla media y bien proporcionado, de constitución muy robusta aunque parecía frágil. Su pureza de raza era evidente[...]En su rostro se reflejaba sentimentalidad. Sus ojos tenían el iris pardo y brillante, reluciente en los momentos de excitación, cuando parecían cambiar de forma.


La crisis matrimonial se agravó en 1886, cuando Rodolfo contrae una enfermedad venérea, seguramente gonorrea, y se la transmite a sus esposa, con quien ya no podría tener mas hijos y se hacía imposible tener un sucesor, lo que nunca le perdonó su esposa. Los continuos dolores de su enferdad le llevaron a consumir morfina y cocaína, anestesiantes de la época, y anque conocía los riesgos del tratemiento empezó a consumirlos con tal regularidad que solía inyectarse a escondidas de su familia. Todo ello unido a un espíritu débil, marcado por una infancia tortuosa, viviendo en una sociedad que no le comprendía y con una madre ausente el 80% del tiempo, le llevaron a ideas suicidad, ideas que compartió con su amante Mizzi Caspar. A ella le propuso suicidarse juntos, proposición que fue denegada.


En 1888 conoce a Mary Vetsera, al parecer ella estaba locamente enamorada de Rodolfo. Fue Maria Wallersee la que los presenté y concertaba sus citas, con intenciones no muy buenas, pues como se supo posteriormente lo hacía por dinero. Mary y Rodolfo no hacía no 15 días que se conocían cuando cuando se empezó a planear el doble suicido, que todo parece indicar que fuera una estratagema de Rodolfo para que ella lo acompañara hasta la muerte, pues él seguía manteniendo relaciones con Mizzi Caspar. En cualquier caso, el doble suicido está rodeado de un halo de misterio. Dicho suicidio tuvo lugar la noche del 29 al 30 de enero de 1889. Parece ser que el archiduque disparó primero a Mary y luego, con ayuda de un espejo se disparó contra sí mismo. Fueron descubiertos por su criado Loschek. El cúmulo de silencios y versiones confusas dieron lugar a toda clase de leyendas que ha dado lugar a libros y películas, algunas de esas versiones son:
Que se suicidó junto a su amante porque su conspiración política contra su padre había fracasado. De hecho, César Vidal en Libertad Digital , dice que Rodolfo llegó a un acuerdo con los Húngaros para dar un golpe de estado y que el 28 de enero tuvo una compadecencia con su padre de la que nada se sabe.

Que se suicidó "por amor" ya que no podía divorciarse de su esposa, a la que detestaba y que no podía darle hijos varones, y casarse con su amante húngara. Incluso había pedido al Papa que anulase su matrimonio para casarse con la baronesa Vetsera, lo que evidentemente le fue denegado.

Que no se suicidó sino que fue asesinado por los propios servicios secretos austríacos, ya que sus ideas habrían hecho peligrar el Imperio en caso de suceder a su padre o porque ya había conspirado con los nacionalistas húngaros el proclamarse rey de una Hungría independiente. Esta teoría acusa a Francisco José I de mandar asesinar a su hijo.

La última emperatriz de Austria, Zita, dijo antes de morir que Rodolfo había sido víctima de un complot organizado por los servicios secretos franceses, obligados a silenciarle tras arrepentirse el heredero de haber llegado a un acuerdo con ellos para traicionar a su padre y ocupar su trono con el fin de aislar a Alemania.

Otras versiones sostienen que se trata de un simple caso de amor y celos, un crimen organizado por la mujer de Rodolfo tras la decisión de éste de repudiarla para casarse con María Vetsera.
En cualquier caso, hoy la muerte de Rodolfo sigue siendo un misterio, pues la tesis del suicidio no se sostiene por el hecho de que su funeral se realizó con los rituales católico, rituales prohibidos para los suicidas, y por el hecho de que Rodolfo se hallaba tapado hasta el cuello, cosa inusual. Ni siquiera en las cartas dejada a su hermana, María Valera, donde hablaba del fin del imperio, y a su madre, aclaran nada, pues de la primera apenas se sabe nada y la dejada a su madre fue quemada por expreso deseo de ella tras su muerte, solo se sabe que decía no ser digno de su padre y que por temor al más allá se llevo a Mary Vetsera con él y que sin ella quizás no se habría atrevido.
FUENTE:
Caso, Ángeles: Elizabeth de Austría-Hungria. Biografía Definitiva de la Emperatriz, Editorial Planeta, Barcelona, 2005.

18 de mayo de 2009

La Vida en alta mar: la complejidad socio-étnica.

La América colonial se caracterizó por tener una sociedad profundamente miscegenizada debido a la presencia de tres troncos raciales: el europeo, el indígena y el africano. La sociedad colonial se organizó, por tanto, según una pirámide en cuya cúspide encontramos a los blanco, de procedencia peninsular o criollo. En oposición a los blancos encontramos a los indígenas y entre medio las castas surgida de las mezclas como los mestizos (mezcla de blanco e indio) y los mulatos (mezcla de blanco y negro). Es por ello que se suele hablar de la "república de los españoles" y "república de los indios".


En lo que se refiere a la "república de los españoles", se trata de un universo de blancos con mentalidades y valores de blancos. Es un grupo socio-étnico dirigente. Estaba constituida por los siguientes grupos:


Peninsulares: Son los nacidos en la península y recibieron diferentes nombres: "ñopos" en Colombia, "Chapetones" en Perú, "gachupines" en México. Existía una clase alta formada por funcionarios, mercaderes, concesionarios de minas, etc.; clase media formada por cargos medios de la administración civil y eclesiática o bien profesionales liberales, etc.; y clase baja que es la de los obreros. Se les denomina "blancos de orilla" pues se suelen mezclar con los indios, mestizos, etc.


Criollos: Son los blancos nacidos en América. Tiene un orgullo especial, se siente superior al peninsular porque, casi siempre, los peninsulares son emigrantes pobres, y ellos, los criollos, llevan varias generaciones afincados en América y se sienten nobles y herederos de los primeros conquistadores. Lo criollo es lo netamente americana y su significado se vinculará con lo nacional, la identidad nacional. Al igual que en los peninsulares había una clase alta constituida por grandes terratenientes, que poseen títulos de nobleza castellana; clase media constitudida por funcionarios, eclesiásticos, etc.. y la clase baja formada por criollos obreros.




Mestizos aculturados: Son la mezcla de blanco e indios, aunque muchas veces hace referencia a todo tipo de mezcla. Si los mestizos estaban legitimados por nacimiento, o tienen dinero para comprar la legitimidad, y tienen asimilado el universo de los blancos, entonces forman parte de la "república de los blancos".


Caciques indígenas: Se trata de los jefes de las Comunidades indígenas que, traicionando a su propio pueblo, se puesieron al servicio de los nuevos amos. La función de los caciques era recolectar el pago del tributo indígena y reclutar a su súbditos para trabajos forzados en las encomiendas, mita de las minas y obrages ( talleres textiles donde trabajaban obligatoriamente sólo indígenas en condiciones infrahumanas). Recibían títulos de nobleza, aunque algunos de ellos se opusieron como Tupac Amaru II.



En lo que se refiere a la "república de los indios", se trata marginal y dominada por los blancos. Dentro de ella estan los indios, los esclavos africanos, la gran mayoria de mestizos y toda la suerte de raza mezclada. Está formada por los no blancos pobres que constituía y constituye en la actualidad la cifra del 80% de los habitantes del continente. A continuación una lista de las castas:





De español a india, mestizo


De mestizo y español, castizo


De castiza y español, español


De española y negro, mulato


De español y mulato, morisco


De español y morisca, albino


De español y albino, torna atrás


De indio y torna atrás, lobo


De lobo e india, zambayo


De zambayo e india, cambujo


De cambujo y mulata, albarazado, etc.



FUENTE PARA LA VIDA EN ALTA MAR:

Martínez, J.L.: Pasajeros a indias. Viajes trasantlánticos en el siglo XVI.

Pérez Murillo, Mª Dolores: Introducción a la historia de América: altas culturas y bases de la colonización española.

17 de mayo de 2009

La duquesa, La Reina Victoria

Estudié en una asignatura que decía que la historia de está de moda, no hay nada más que ver los libros que se editan (La casa de los siete pecados, Los pilares de la Tierra), las series que echan por televisión (Roma, Aguila Roja, Los Tudors) y el cine. Esto no es nuevo, la historia ha estado presente en el cine desde el momento en que surgió, nada más hay que ver las superproducciones como Quo Vadis, Espartaco o Benhur. Hoy día se han versionado muchas de estas películas, ganan en ambientación, en efectos e incluso en documentación, aunque no siempre, sólo hay que recordar la desastroza Troya de Brad Pitt y Eric Bana. Sin embargo esto no siempre es así y últimamente tenemos dos ejemplos de ello: La Duquesa y La Reina Victoria.





La Duquesa (The Duchess) es una película ambientada en la Inglaterra del siglo XVIII. La protagoniza la siempre increíble Keira Knightley y el polifacético Ralph Fiennes y trata la vida de la Duquesa de Devonshire en una Inglaterra sumida en la Ilustración y en la Revolución Industrial, la Independencia de las Colonias y el reinado de Jorge III.



La trama de la película se centra, sobre todo, en el tortuoso matrimonio de la joven Georgiana Cavendish con el déspota Duque de Devonshire cuyo único objetivo era tener un primogénito para así asegurar su linaje. Georgiana Spencer nació en 1757 en el seno de una familia poderosa. Fue reconocida por su belleza y siempre se codeó con las grandes figuras políticas y literarias de su época. Destacó su actividad en la política, ella era partidaria de los Whigs (Partido Liberal Británico) y promocionó a Charles James Fox. En 1774, un día antes de que cumpliera 17 años, Georgiana se caso con el Duque de Devonshire. No pudo quedar embarazada inmediatamente, lo que se convirtió en un asunto aristocrático. Tuvo muchos abortos involuntarios antes de dar a luz dos hijas y antes del tan esperado varón. Su marido lo fue infiel con Elizabeth Foster, con quien se casó después de la muerte de la Duquesa. Durante años tuvo que tolerarla en su casa, rumoreándose, incluso que hacían un menage a trois. Por su parte Georgiana tuvo un romance con Charles Grey de quien tuvo una hija en 1792. Georgiana se convirtió en todo un referente para la moda. Se le suele vincular tanto con Lady Di, descendiente suya, como con María Antonieta, por los paralelismos de su vida. Murió en 1806.




En lo que se refiere a la película destaca, desde mi punto de vista, por la ambientación y el vestuario, siempre destacable en las películas inglesas. Los actores son increíbles, Keira como siempre destaca en su papel de mujer de época, ya destacó en Orgullo y prejuicio y vuelve a destacar interpretando a esta destacable mujer. Sorprendente, sin duda, el polifacética Ralph Fiennes, quien llega a tal grado de despotismo que se llega a aborrecer. En lo que se refiere a la trama, desde mi punto de vista, se centra demasiado en el tortuoso matrimonio, aprovechándose esa similitud con Lady Di para sacar partido y hacer publicidad, cuando se podían haber centrado en otros aspectos de la vida de la Duquesa como su actividad política, destacable en una época donde el sufragio femenino ni siquiera estaba en el pensamiento. En general, históricamente se puede decir que es correcta, es fidedigna a la vida de la Duquesa, y es de apreciar que la ficción no haga confundir la historia como una historia de amor, sino que es una historia donde además de relatar la vida de la Duquesa, se observa la vida en la alta nobleza inglesa basada en la apariencia, la frialdad, el despotismo, etc. Quizás él único aspecto amoroso que refleja la película es el amor que la Duquesa sentía hacia sus hijos, fruto de la ficción o quizás de la realidad.




"La reina victoria" (The young Victoria) es una película ambientada en Inglaterra del siglo XIX, justamente un año antes de la muerte de Guillermo IV y la sucesión de Victoria I y sus primeros años de reinado. Está protagonizada por Emily Blunt y Rupert Friend. Trata sobre la llegada de Victoria I a la corona inglesa, su primeros años marcados por la política de Lord Melbourne y su romance con Alberto de Sajonia, centrándose al final en ésto último.
Alejandrina Victoria nació en 1819, hija del Duque de Kent y única heredera de la corona ingles tras la muerte de las hijas de Guillermo IV. Su educación estuvo marcada por su futuro puesto como reina, apenas estaba sola y no podía hacer nada por su cuenta. Siempre estuvo condicionada por su madre y por Sir John Conroy. En 1837, con 18 años, accede a la corona inglesa y muy pronto se deja influir por Lord Melbourne del Partido Liberal Británico. Su influencia llegó a tal que se la llegó a conocer como Lady Melbourne. Esta influencia provocaría lo que se conocería como Crisis de las Damas de Cámara, ya que todas éstas eran esposas de hombres pertenecientes al Partido Liberal. En 1840 casa con Alberto de Sajonia, se piensa que éstaba enamorado de Victoria y que sólo accedió a casarse con ella presionado por si tío y por ganar estatus social, pero se sabe que con el tiempo fue extremadamente feliz. Fue un marido fiel, cumplidor de sus votos nupciales, y su asesor personal lo que le hizo alejarse de Lord Melbourne, no volviendose a repetir la famosa Crisis de las Damas de Corte. Del matrimonio nacerá 9 hijos. Los enlaces de estos hijos hará que a Victoria se le conozca como "La abuela de Europa". En 1861 moriría el Príncipe-Consorte Albeto sumiéndola en el luto el resto de su vida, ganándose el apelativo de "Viuda de Windsor". No volvió a casarse aunque se rumoreó que tuvo un romance con Joh Brown, un criado escocés. Murió en 1901 y su reinado ha sido el más largo de la historia inglesa.
De nuevo una película que destaca por la ambientación y el vesturario, cada detalle obliga al espectador estar atento a la película al 100%. Emily Blunt destaca haciendo de reina, y sin duda empezará a ser una actriz reconocida. En lo que se refiere a la trama, aunque se centra mucho en el romance de Victoria y Alberto, refleja muy bien como la reina es manipulada por cada persona que tiene a su alrededor, quienes aprovechando su juventud e inmadurez, pretenden hacer de ella una marioneta para así imponer sus intereses: John Conroy, Lord Melbourne o su tio Leopoldo, rey de Bélgica. En la película además se muestra la famosa Crisis de las Damas de Corte, y su corte de relación con Lord Melbourne en favor de su esposo Alberto de Sajonia quien se convertirá en el asesor real. Una película deliciosa en todos los sentido que ayuda a acernarnos a la historia de esta reina quien está presente en muchas de las casas reales de europa.
Tráiler:

http://www.youtube.com/watch?v=Va0b3EIi4uc (La reina victoria)

http://www.youtube.com/watch?v=kZGNNsOXi_4 (La duquesa)

9 de mayo de 2009

La prostitución, un mal inevitable y necesario.

El estudio de la prostitución, tal y como comenta Rosa Mª Capel (autora a la que he recurrido para hacer esta entrada) es complejo, en primer lugar, por el tabú que hasta hace poco envolvía al tema provocando ausencia de fuentes documentales necesarias para sustentar el análisis, en segundo lugar porque el término de prostitución engloba hechos muy distintos y significado. Como prostitución puede entenderse la entrega de muchachas vírgenes a los templos hasta aquellas relaciones en las que se dan tres elementos: tráfico económico, entrega por dinero e indiferencia emocional de quien la ejerce. Incluso algunos autores considera prostitución a la relaciones extraconyugales permitidas en ciertos estratos extraconyugales. La tercera dificultad de estudio reside en la diversidad de matices y aspectos que comporta dicho tema. Esta entrada se sitúa en el contexto histórcico de los años de la monarquía restaurada, mitad del siglo XIX.
Las razones que llevan a la prostitución son varias, como bien dice la profesora Capel, la prostituta no nace, se hace. Uno de los motivos es esl psicológico: carencia de afectos paternos y deseo de alcanzar algo, como el matrimonio, pero por diversos motivos este "deseo" es imposible. Otra motivación es la de índole social: la incitación constante al lujo, el afán por emular a las integrantes de capas superiores, etc. Otro motivo puede ser el cultural: el analfabetismo será el denominador común de la inmensa mayoría de las prostitutas y el último motivo el económico: la escasez de los salarios femeninos, las "concesiones" que muchas mujeres se ven obligadas a hacer a sus jefes para mantener el empleo, las necesidades y la imposibilidad de satifascerlas de "forma decente",etc. Lo normal es que el conjunto de estos motivos lleven a la mujer a prostituirse. En el París del siglo XIX de cinco mil mujeres encuestadas, más de dos mil ochocientas confiesan haberse prostituido tras ser seducidas y abandonadas, mientras que mil doscientas cincuenta más lo hicieron ante la presión de las circunstancias. Tampoco hay que olvidar que serán los estratos inferiores de la clase trabajadora los que se verán obligados a someterse esa situación. Aunque, ejerciéndola de forma más o menos solapada, nos encontramos a un cierto número de integrantes de clase media qye en las tertulias de los cafés o en los paseos acuerdan citas clandestinas a realizar en casas amigas, con el fin de pagarse determinados lujos.
Relacionado con la prostitución nos hallamos con el tema de la trata de blancas. Éste nace al tiempo que los prostíbulos. Los que los dirigen buscaban a niñas de 13 a 16 años que andaban por las calles para convertirlas en nuevas pupilas. También se utilizaban algunos anuncios o agentes teatrales, chulos, pupileras, etc. En un principio el trata de blancas se limitaba al ámbito local y a la corrupción de menores, no tardará sin embargo, en superar el marco geográfico.
El tráfico se hallaba perfectamente organizado. Lo controlaban agentes mercantiles anónimos y sus líneas de intercambios eran varias: Europa Central, Turquía, Rusia, etc. Así como los puertos de mar.
Dos eran las modalidades que se tenía para ejercer la prostitución: en casas de lenocidio o a nivel individual, unas veces en su propio domicilio, otras, acudiendo a casas de citas. La primera de estas formas, tiene carácter público y se encuentra oficialmente tolerada. Dentro del burdel, las condiciones en que se desenvuelven su existencia es infrahumana. Nada más ingresar, las pupilas pierden todo lo que de alguna manera les pertenece y cambian de nombre. Durante el tiempo que dure su permanencia allí, utilizarán la ropa, los muebles y habitaciones de la casa que son bastante deficientes. Carecen de pecunio propio y solo puede disponer de las propinas en en ocasiones reciben de sus servicios, sin embargo, para evitar que ahorren, el ama de la casa (meretriz) les obliga a comprar ropa o cualquier capricho. Estaban obligadas a aceptar cualquier tipo de clientes y a veces recibían palizas de las meretrices. Generalmente, cuando envejecía, acababan borrachas o en la cárcel, si no habían muerto de alguna enfermedad venérea. Este tipo de prostitutas constituían una minoría dentro del mundo de la prostitución.
La mayor parte de las prostitutas corresponden al segundo tipo. La ventaja de este tipo de prostitución es la independencia que otorga a quines la ejercen acerca del cómo, cuando, con quien y por cuánto. Aunque sus riegos también eran mayores, pues no era extraño que la prostituta acabara siendo víctima de un homicidio.
Ambos tipos de prostutición tenían puntos en común. Uno de ellos eran las enfermedades. Muchas de ellas se curaban en su propio domicilio, con remedios caseros o aprendidos de la más avezadas. Otras van a hospitales, dependientes por regla general de las Diputaciones o Ayuntamientos, en los que, su estancia no podía resultar más deprimente pues se le ubicaban en salas sucias y malolientes, cuyas ventanas no servían ni para ilumina, ni para ventilar pues la cerraban rejas para evitar todo posible contacto de las enfermas con el exterior. El médico las trataba con crueldad y las maltrataba de palabra y de obra.
La prostitución fue considerado como "un mal inevitable y necesario". Inevitable porque es consustancial al individuo y necesario porque se consideraba que al perseguir a las mujeres públicas en el mundo burgués, se garantizaba la castidad y el honor de las restantes. Sin embargo, era preciso controlarlas, de ahí que con anterioridad al siglo XIX, las disposiciones oficiales persiguiera un doble objetivo: aisla a la prostituta en lugares concretos y ajustar su comportamiento a pautas que la distingan. A lo largo del siglo XIX se crearán una serie de reglamenteos para conseguir esos objetivos, siendo de gran importancial el Reglamento de 1865 y el Reglamento de la Inspección de salubridad Pública en sus secciones de Higiene de las Nodrizas y de la Prostitución de 1877. Sin embargo, la eficacia de los reglamentos eran limitada. Por lo que se buscarán nuevos medios de lucha contra la prostitución. No se tratará de eliminarla, sino de atemperar sus términos. Se intentará adoptar medidas que eviten dos problemas: el ingreso en el prostíbulo y la salida de él. Frenar áquel, atacando la trata de blancas; y facilitar éste, creando lugares donde reeducar con carácter práctico. En estos objetivos se unieron esferas públicas y privadas, e incluso, varios paises se unieron para solucionar los problemas a través de conferencias, reuniones, congresos, etc. Abordándose en ellos todos los aspectos que comportan el tráfico de blancas, así como las iniciativas tomadas para reprimirlo. Y aunque no tuvieron el éxito esperado, tampo fueron un rotundo fracaso pues de ello surgió la reforma del Código Penal español en 1904. Además los congresos favorecieron la creación de instituciones protectoras de las jóvenes, aunque la eficacia de los centros distaron mucho de lo que sus fundadores esperaban.
Por último, cabe mencionar que también hubo una vía abolicionista. Sus argumentos: atentado a la dignidad humana y atentado a la dignidad a la mujer.
FUENTE: Capel Martínez, Rosa Mª: "La prostitución en España: notas para un estudio socio-histórico" en Mujer y sociedad en España 1700-1975, Ministerio de Cultura, 1986.
Aconsejo leer también una novelita de Alejandro Dumas (hijo): La Dama de las Camelias, que cuenta una historia de amor, ya entendereis porque aconsejo leerla en esta entrada.

8 de mayo de 2009

Potosí y Huancavelica, el infierno en la tierra.

La llegada de los españoles al continente americano, no sólo supuso la llegada de una nueva cultura, una nueva lengua, una nueva religión, todas esas cosas positivas que intentan justificar la colonización de la Corona Española a un lugar que no era suyos, sino que también supuso la llegada de la explotación, de la esclavización, de la crueldad, del sometimiento, etc. Y un buen ejemplo de ello es Huancavelica y Potosí.



En la actual Bolivia, denominada "Alto Perú" en la época colonial y dentro del Virreinato del Perú, se encuentra Potosí a 4200 metros de altura, en plena puna. Es una meseta fría y desolada, sin campos de cultivo alrededor, una zona hostil y de constantes vientos, asilada geográficamente. A 1000 kilometros se halla Huancavelica, en los Andes peruanos, donde se hallaban las minas de mercurio. Ambos lugares de producción, el uno de plata y el otro de mercurio, necesario para extraer la plata a través de lo que se denomina amalagama de mercurio creado por Bartolomé de Medina.

Potosí fue descubierto en 1545, es un cerro con diversas capas de riqueza: plata y estaño. Actualmente el "cerro rico", así denominado" está totalmente agujereado y amenaza con el desplome. Como ciudad llegó a ser una de las más populosas del mundo, denominada de forma distinta: "joya del Imperio", "principal nervio del Estado", "montaña maldita", etc. Para conocer Potosí se posee una obra de gran importancia: Relación de la Villa Imperial de Potosí que data de 1580. En ella describe física y humanamente la ciudad, así como las relaciones de producción y el régimen de explitación del "cerro rico".



En lo que se refiere a las relaciones de producción, en Potosí no hay propietarios, sino concesionarios de minas, es decir, las minas, el subsuelo son siempre de la Corona, y al particula que pone el capital, los medios de producción, la mano de obra y el riesgo se le "concede" la explotación de la mina con todos sus beneficios, estando obligado a pagar a la Corona por dicha "concesión" un quinto de la riqueza obtenida, llamado "quinto del real". La mano de obra estaba constitudida por indígenas que responden a las siguientes tipologías:



Maloca: era el indígena esclavo, capturado en las guerras de Chile, se les compraba, capturados con collar en 20 peses y revendidos en Potosí a 100 pesos.



Mingado: Se trataba del indio contratado que recibía un salario de medio peso si sacaba 23 kilos de mineral de plata al día.



Mitayo: Sus orígenes se remontan a la Mita, de la época incaica, que consistía en el reclutamiento forzoso de los varones entre 20 y 50 años para obligarlos a trabajar para el Estado inca. Dicha obligación la mantuvo el Virrey Francisco de Toledo para así obligar a los indios a trabajar en las minas de Potosí y Huancavelica. Así los indígenas y sus familias eran reclutados por los "curacas", jefes indígenas, para así pagar el impuesto laboral. Muchos de ellos se arruinaban y pagaban al curaca el precio de su libertad, otros se veían obligados a cumplir con el turno de mita de uno a tres años. La mayoría no volvían a su ciudad de origen. Las minas de mercurio de Huancavelica eran mataderos humanos de forma que en las comunidades indígenas se decían misas de difunto porque se sabía que no volverían.




Los indios que trabajaban en Potosí antes de adentrarse en el interio de la mina invocaban al dios Tío (ver foto) para que les ayudara en la extracción del mineral. El trabajo se realizaba en unas galerías insalubres, preparadas para una actividad diaria no superior a cuatro horas, y ellos trabajaban un mínimo de ocho y debían sacar todos un mínimo de 23 kilos de minaral diario. Estaban expuestos a todo tipo de enfermedades. Para trabajar en Potosí y soportar la altura, debían de consumir mucha coca (hierba que ayuda a soportar el mal de altura o soroche) y a mayor consumo e coca se rendía más y se comía menos, por lo que su consumo fue muy popularizado. A todo ello hay que añadir los malos tratos que los indígenas recibían cada día al salir de la mina.













FUENTE: Pérez Murillo, Mª Dolores: Introducción a la Historia de América: altas culturas y bases de la colonización española, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Cádiz, Cádiz, 2003.

7 de mayo de 2009

La Vida en alta mar: Los pasajeros esclavos.

El estudio en torno a los pasajeros esclavos que viajaban a América, ha quedado al margen de los estudios de emigración y se suelen encontrar en obras especializadas. Sin embargo, la emigración esclava fue constantes desde el siglo XVI hasta bien avanzado el siglo XIX y ha llegado a ser un elemento importante en la formación de las nuevas sociedades americanas y de sus culturas.

Las causas que provocaron la exportación de los esclavos a América, fue el exterminio de la población indígena, tal y como Bartolomé de las Casas relata en su Brevísima relación de la destrucción de las Indias. Ante la ausencia de mano de obra, los colonos idearon traer de África, como esclavos, una mano de obra más fuerte, capaz de realizar trabajos colo los de las minas y los ingenios de caña de azúcar. Y aunque las Leyes nuevas de 1542- tras una larga lucha llevada a cabo por Bartolomé de las Casas- prohibieron la esclavitud de los indios (algo que había que poner en entredicho, pues aún no siendo esclavos, vivían como tales) los españoles y los portugueses no tuvieron muchos escrúpulos a la hora de esclavizar a los negros, de hecho, la idea de esclavizar a los negros lo defendió Bartolomé de la Casas en su empeño de defender a los indígenas.


La Corona española accedía a los esclavos a través de negociaciones con los portugueses, a quienes les pertenecía el comercio de esclavos al tener posesiones en África. Más tarde, cuando Portugal se incorpora a la Corona española durante el reinado de Felipe II, el tráfico de esclavos se facilita para España.


Generalmente, los esclavos procedían de los territorios situados cercanos de las costas americanas donde hoy se encuentra Mauritania, Segena, Guinea, Sierra Leona, Liberia, Costa de Marfil, Ghana y Nigeria. Aunque los más apreciados eran los que procedían de Guinea. La captura se hacía por la fuerza o bien a través trueques y tratos con los jefes tribales. Generalmente, los esclavos eran prisioneros de guerra, convictos de delistos o bien africanos que se vendían así mismo para sobrevivir. En los trueques los jefes tribales solían recibir relas, aguardiente, ajos, cuentas y hierro.


Una vez capturados se formaba con los esclavos una larga caravana para llevarlos a la costa. Para evitar la fuga de los cautivos se les ataba uno a los otros por medio de horquillas y cuerdas que les sujetaban los cuellos y, a veces, por cepos en los pies. A ambos lado de la caravana iban los vigilantes, que con látigos y lanzas apuraban la marcha, golpeaban a los rezagados y, cuando algunos de los esclavos caía rendido, les cortaban la cabeza.




A llegar a los puertos se los amontonaban y encadenaba en barracones, salas de putrefacción donde se confundían sus excrementos y las ulceraciones de sus llagas, y la muerte continuabana diezmándolos. Cuando había sobrantes y escaseaban los compradores, se solían dejar a un lado los enfermos y cuando seguía habiendo sobrantes se les dejaba morir o se les exterminaba. Aunque le interés comercial aconsejaba darle un buen trato a los esclavos para que así parecieran saludables a la hora de su venta.


Antes del viaje, y para no llevar herejes, a los esclavos se les solía bautizar. Para evitar el suicidio durante el viaje, los esclavos eran encadenados de a seis y unidos por parejas con grillos en los pies. Así se les acomodaba acostados, en las llamadas armazones que se instalaban bajo la cubierta, en la bodega que en los barcos normales se destinaba a transportar la carga. Para evitar motines se les llevaba periódicamente a la cubierta para tomar aire fresco y hacer algún ejercicio. Eran transportados en condiciones infrahumanas, y sólo recibían un alimento al día. Las enfermedades solían propagarse como la pólvora, por lo que la muerte de los esclavos eran frecuentes, de ahí que era normal que se autorizara la carga de un 10 o 20% más de esclavos para compensar las pérdidas en el viaje. A mediados del siglo XVII, los portugueses descubrieron que un trato más humanitario aseguraba la llegada del "cargamento" en mejores condiciones y el número de bajas era menor.


El precio de los esclavos eran elevados, en los puetos americanos los esclavos llegaron a venderse hasta en 500 pesos cada unos. Ya en la ciudad de destino los precios eran más altos. Una vez vendido, era herrado, con una pequeña marca, que los portugueses llamaban "carimba".


En el lenguaje de la época se fueron adoptando varias denominaciones: "bozal" para el esclavo recién llegado, "mulequillos" para niños y adolescentes hasta los 7 años, "muleques" hasta los 12 años, "mulecones" hasta los 16, "ladino" a los que habían aprendido español, "criollo" al que había nacido en posesiones españolas y "cimarrón" al huido y perseguido por la justicia.

El monopolio español-portugues en América incluía también al tráfico de esclavos, y éste era uno de los comercios más provechosos. Además, los esclavos de contrabando podían venderse a precios menores que los muy altos que alcanzaban los introducidos legalmente, de ahí que los colonoes prefirieran comprar los esclavos de contrabando. Uno de los mayores traficantes de esclavos fue el inglés William Hawkins quién viajó en 1530 y 1532 de Guinea a Brasil traficando con esclavos y colmillos de elfantes; en 1562-3 su hijo John hizo un primer viaje, a Sierra Leona y Guinea para capturar esclavos que llevó a la isla de Santo Domingo, y en 1567 llevó al mismo destino 400 ó 500 esclavos que comenzó a vender tanto en la isla como en puertos del continente, pese a la prohibición de la Corona española.

P.D: Dedicado a Sagres, fan incondicional de este blog.

5 de mayo de 2009

La Vida en alta mar: La piratería.

Los peligros mayores de la navegación en el siglo XVI era, sin duda alguna, la piratería, las tormentas y los huracanes.



Las prohibiciones que la corona española estableció para el comercio de indias -pues he de mencionar que al contrario que los portugueses o ingleses, los españoles establecieron un monopolio-, añadido a la codicia y la relativa moralidad de los hombres, hicieron posible la piratería. Sin embargo, es necesario recordar que los piratas son aquellos ladrones que robaban en cualquier mar y los corsarios son lo que robaban a una embarcación armada, con patente o permiso de su gobierno. Los piratas se hicieron con la isla torturga, una isla situada en el océano Atlántico de 37 kilómetros de largo, por 7 kilómetros de ancho, al noroeste de la República de Haiti. La fortificaron y la convirtieron en su refugio donde estaban sus almacenes.


Los piratas tenían su propio código privado e incluso indemnizaciones. La ferocidad de los piratas con sus vícitmas eran bien conocidas, solían secuestrar a algunos rehenes para pedir rescate y cuando asaltaban puertos también asesinaban y violaban. Aunque la crueldad de los españoles hacia los piratas no era menor.


--> Piratas franceses: (1520-1559) Fueron los primeros que aparecieron. Al principio no pasaban de las Canarias, ya en 1520 amenazaban Cuba. Un robo histórico fue el del tesoro de Moctezuma realizado por Juan de Florín o Giovanni Verrazano quien cuando fue condenado dijo: Oh Dios que tal has permitido, oh fortuna que a tal punto me has traido: ¿es posible que habiendo yo muerto a tantos, a manos de un hombre solo tenga yo de morir?. Jean Fleaury, Juan Florentino o Florín es posiblemente Giovanni Verrazano, el hermano de Jerónimo Verrazano, geógrafo florentino establecido en Francia. Juan Florín entró al servicio de Jean D’Ango, un armador de origen italiano establecido en Dieppe, Normandía, que le contrató como corsario. Florín estableció su base de operaciones entre las Azores y las Canarias, donde capturó parte de una flotilla de siete embarcaciones que iban a Canarias con emigrantes. En 1521 apresó cerca de las Azores tres embarcaciones que venían de América con el tesoro azteca de Moctezuma, enviado por Cortés tras la conquista de México; unas 58.000 barras de oro. Redondeó su buena fortuna apresando otro navío procedente de Santo Domingo, que transportaba 20.000 pesos de oro, perlas y gran cantidad de azúcar y cueros. Fue, por ello, el primer pirata americano. Posteriormente siguió asestando otros golpes de menor importancia hasta que fue hecho prisionero en 1527 por el capitán Martín Pérez de Irizar cerca de Cádiz. El corsario fue llevado a la Casa de la Contratación de Sevilla, donde confesó haber hundido más de 150 naves diversas. Se le remitió preso a Carlos V, que envió un mensajero con orden de ejecutar al pirata donde le encontrara. El mensajero real le halló en el pueblo de Colmenar de Arenas (provincia de Toledo), donde fue ahorcado.


Sólo con la paz de Cateau-Cambresis firmada en 1559, entre España y Francia, y el matrimonio entre Felipe II e Isabel de Valois comienza a cesar el azote que fueron los corsarios franceses para el comercio marítimo español.






--> Piratas ingleses: (1560-1648) Destaca el comercio de esclavos de los Hawkins, posteriormente sucedido por Drake. De 1577 a 1580 Drake dio la vuelta al mundo y se esforzó muchísimo en hacer ver que él había sido el primer hombre en circunnavegar la tierra olvidando a Juan Sebastián el Cano y a Magallanes. En 1587 ataca el puerto de Cádiz por orden de la reina Isabel y destruyó hasta 30 navíos. En 1596 muere a mano del almirante asturiano Méndez Cancio en Panamá, aunque los ingleses se empeñan en decir que fue de disentería. Lope de Vega lo llegó a denominar Dragón cruel de Medea. El Dragón es Drake y Medea Isabel I.


No se han encontrado ningún relato directo entre piratas/pasajeros. Aunque si era grande el temor de los pasajeros.


Numerosos hechos favorecieron la piratería:
->El tráfico español era exclusivamente una empresa privada.
->Apoyo de la corona inglesa y francesa a la piratería.
->Escasa atención a la protección militar del extenso terreno que poseían.
->Avaricia de los armadores que colmaban los barcos de mercancías pero no de las armas.